La siguiente frontera

El sector de la animación, los videojuegos y los VFX lleva años saltando vallas, evolucionando a golpe de talento y con una carencia crónica de financiación. Con todo y con eso sigue creciendo: en prestigio, premios, y capacidades.
Las mejoras tecnológicas en la producción virtual pueden permitirle al sector abordar ahora otro nuevo reto: la industrialización de contenidos para entretenimiento. Producciones de bajo coste, intensivas en tecnología, creación masiva de librerías y assets de contenidos incrustables en producciones audiovisuales. Esos contenidos se consumen de manera masiva en Asia. Y podemos hacerlos desde España, de manera competitiva.
Una de las vías para ello es la oferta creíble de trabajo y la formación de profesionales de nivel medio en la España rural, con calidad de vida contrastada y un coste de la vida menor, en donde sueldos escasos en Madrid o Barcelona son buenos sueldos allí.